Mi generación nació con un celular en la mano (prácticamente) exigimos inmediatez de respuesta, cada vez tenemos menos tolerancia a la frustración y un video de 30 segundos nos parece largo.
He pecado de exigir respuesta inmediata, no lo voy a negar, esta entrada es para hablar sobre eso; lo que realmente se está viviendo está fuera del celular.
Documentar nuestra vida es diferente a que la vida esté dentro de nuestros dispositivos, en las fotos y videos quedan nuestros recuerdos pero debemos tener cuidado y estar conscientes de sentirlo nosotros de primera mano.
Todxs tenemos una vida, todxs estamos ocupadxs. Tenemos que vivir para poder contar a los demás lo que nos pasa, así se comparten las historias.
Hay que vivir la historia para poder contarla, asegúrate de vivir tu vida y luego la compartes.
No me malinterpretes, me encantan las fotos y videos del día a día, son flashes de nuestra vida al mismo tiempo me gusta pensar que mis ojos nunca lo van a olvidar, es cuestión de balance.
Al vivir primero y después contar lo que nos pasa queda un toque de autenticidad que no quiero perder nunca.
Eventualmente te va a contestar, salgamos a vivir para después compartirlo.
-cacho de humano
Comments