Regar y mantener
- Carla Castillo
- 27 may
- 2 Min. de lectura
Lo más difícil de cualquier detalle de la vida a mi parecer es darle mantenimiento, seguimiento y ver que funcione para todas las partes involucradas.
A parte de escribir, trabajo en logística y la raíz de mi puesto se trata de eso, dar el seguimiento necesario para que las cosas pasen de un punto A a un punto B. Me encanta hacer eso, me fascina hacer que las cosas sucedan.
No negaré que a veces recibes una llamada a las 7am porque algo salió mal, toca reagruparse y solucionar. Creo que así es la vida, así son las relaciones que uno va formando en la vida.
“Sentirse amado es sentirse visto” escuché hace unos meses, yo creo que es verdad.
Estar al pendiente del otro cual sea la relación (de pareja, familia, amigxs, laboral) es muestra de que nos importa mantener ese puente que nos une con el otro. Ser consciente de lo que le apasiona a la otra persona es de las cosas más hermosas que existen. Es darle seguimiento a lo que le parece importante a esa persona que tanto te importa.
Para que sea genuino sale hasta natural, desinteresadamente quiero saber absolutamente todo de ti, lo que te mueve, lo que te da miedo y lo que anhelas con todas tus fuerzas.
El acto de regar y mantener tus relaciones es lo que las mantiene vivas.
Procurar al otro pensando en qué quiere, sueña y necesita sin olvidarnos de lo que es importante para nosotros es el arte de las relaciones sanas a mi parecer.
¿Te sientes visto por aquellos que dicen amarte? ¿Ves a los que amas? Un trabajo diario que fortalece las relaciones interpersonales que tenemos y valoramos.
Cuida lo que tienes porque lo quieres.
-cacho de humano
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