Los últimos 15 días de cada año se han ido convirtiendo con el tiempo en una premura y lista que cumplir de rituales y actividades para recibir el año y estar preparado como humano sobre lo que se realizará en el año entrante.
Hoy es 31 de diciembre del 2023 y esta presión e idealización del cierre e inicio de año me parece frustrante en su mayoría. En algunos casos puede resultar motivante un nuevo año (no lo voy a negar, a veces lo es) pero en lo que no estoy de acuerdo es en que hemos realizado un sin fin de actividades o cosas por hacer para recibir el año de la "manera correcta" que a veces es demasiado o simplemente hacerlo no es de tu agrado.
Este inicio de año les invito a hacer lo que les funcione; si realizar rituales, visualizaciones y escribir metas te funciona, adelante. Si eres más de pedirle deseos a las uvas y te funciona, adelante.
Escribir metas, propósitos y pegarlos en imágenes junto a tu cama te funciona, adelante.
Hacer las cosas no está mal lo que no me parece justo es hacerlas como nos dicen para no quedar juzgados ante una sociedad que todo sistematiza y al final quizá no nos funciona igual que como lo hubiéramos hecho nosotros.
Cada persona tiene sus rituales, cada humano sabe como le funciona la vida. Tomemos esta carga de información de cierre de año como consejos y no como otra tarea que hacer.
Lo importante del fin de año quizá no es publicar todo lo que hiciste o poner mucha carga energética en el siguiente año. Lo importante de este día es que es el cierre de un capítulo de tu vida y a la vez es la entrada a otro.
Arma tus rituales. Decide tus rituales. Pero no olvides agradecer por lo vivido, eso es lo realmente importante. Gracias por estar.
-Cacho de humano
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